(San Juan, Puerto Rico – 20 de junio de 2025)
Con el objetivo de sensibilizar a la población de adultos mayores sobre la prevención del fraude, la Oficina del Inspector General (OIG) facilitó una actividad educativa dirigida a fortalecer el conocimiento de las y los participantes sobre cómo prevenir, identificar y reportar acciones que puedan afectar sus derechos y recursos.
El taller titulado “Guardando el tesoro de la experiencia: prevención del fraude para la tercera edad” abordó diversos escenarios sobre tipos de engaños y estafadores, incluyendo el uso de la tecnología y plataformas digitales, así como las leyes y recursos disponibles en Puerto Rico para proteger a la ciudadanía de este tipo de delitos.
“Esta iniciativa forma parte de nuestros esfuerzos educativos dirigidos a concientizar a la ciudadanía sobre las diversas modalidades del fraude y cómo prevenirlo. Todas las personas estamos expuestas a estas prácticas delictivas, y nuestros adultos mayores, quienes pueden presentar una vulnerabilidad particular, deben conocer los riesgos a los que se enfrentan, especialmente a través del uso de teléfonos celulares y redes sociales”, destacó el Inspector Asociado de Asuntos Legales de la OIG, Lcdo. Emanuel Laboy López.
El esfuerzo educativo contó también con la participación del subdirector del Área de Pre-Intervención y Exámenes, Cristian J. Ríos Colón, y del técnico de Sistemas de Información, Juan Carlos Rivera Santiago.
Como parte de la actividad, Ríos Colón definió el fraude como el acto mediante el cual una persona engaña a otra con la intención de obtener un beneficio, normalmente dinero o bienes, de forma ilegal o deshonesta. Entre los escenarios más comunes, indicó el robo de identidad, las estafas románticas, las inversiones fraudulentas, las loterías falsas, las compras engañosas, las transacciones bancarias irregulares y los impostores que se hacen pasar por familiares a través de llamadas telefónicas o redes sociales.
Rivera Santiago añadió, a su vez, sobre el término “phishing”, el cual se refiere a una modalidad de engaño en la que el estafador gana la confianza de la víctima haciéndose pasar por otra persona. “Esta modalidad ha ido en aumento, particularmente en el uso de redes sociales, mensajes de textos y correos electrónicos. Es por esa razón que es importante que desarrollemos destrezas que nos permitan identificar estas acciones y prevenir la pérdida de nuestros datos y recursos”, agregó.