La Oficina del Inspector General (OIG) llevó a cabo una investigación tras recibir una querella el 27 de marzo de 2024, relacionada con el manejo de fondos generados por máquinas expendedoras en la Escuela Especializada en Idiomas Padre Rufo. Según la querella, una empleada recibió pagos en efectivo y giros por concepto de estos fondos, pero no realizó los depósitos correspondientes. La cuenta de fondos propios de la escuela había estado inactiva desde 2021, y la empleada continuó recibiendo dinero hasta 2023. La OIG identificó deficiencias en los controles internos, ausencia de fiscalización y posibles violaciones legales. Se emitieron recomendaciones para corregir estas fallas y prevenir situaciones similares en el futuro.